«Es 90% marketing»: Linus Torvalds barrió el piso con el hype por la IA
En una cumbre reciente, Linus Torvalds, creador de Linux, manifestó su escepticismo respecto a la inteligencia artificial, señalando que en gran parte es «puro marketing». Aunque reconoce el potencial de esta tecnología, considera que está envuelta en mucho sensacionalismo.
Linux y la competencia de los sistemas operativos líderes
Desde su aparición en 1985, Windows ha mantenido el liderazgo en el mercado de sistemas operativos, con más de 1,600 millones de usuarios distribuidos en más de 100 países. Microsoft también destaca en el ámbito de las aplicaciones de productividad con Office 365 y sus populares servicios en la nube, utilizados tanto por empresas como por millones de personas en todo el mundo. Por otro lado, Apple ha conseguido una base de usuarios leales gracias a macOS, con más de 100 millones de usuarios activos que aprecian su ecosistema integrado.
En contraste, GNU/Linux se presenta como una alternativa de código abierto y gratuita, atrayendo a una comunidad dedicada, especialmente entre desarrolladores y usuarios que valoran la flexibilidad y la personalización. En este contexto, Torvalds se ha consolidado como una figura clave que defiende una filosofía de software que prioriza la transparencia y la accesibilidad frente a las estrategias comerciales dominantes de las grandes corporaciones.
La perspectiva de Torvalds: “90% marketing, 10% realidad” en IA
Durante su intervención en Viena, Torvalds compartió sus reservas sobre la IA. Aunque reconoce el potencial de esta tecnología, afirmó que la mayoría de las promesas relacionadas con la IA están infladas por una maquinaria de marketing. Según él, «la industria tecnológica vinculada a la IA está en una posición muy comprometida». Torvalds sostiene que actualmente la IA solo se está aplicando de forma útil en contadas ocasiones, mientras que muchas de sus supuestas capacidades son exageraciones.
Para el creador de Linux, lo mejor por ahora es “ignorar” el fenómeno de la IA hasta que surjan aplicaciones prácticas más evidentes. Sin embargo, no descarta su evolución en el futuro. Según sus palabras, “en cinco años, veremos qué usos de la IA son aplicables a cargas de trabajo reales”.
El escepticismo sobre la IA en la industria tecnológica
Torvalds no es el único con una visión crítica sobre la IA. Robin Li, CEO de Baidu, conocido como «el Google de China», también ha expresado opiniones similares. Li considera que la IA es una burbuja que, probablemente, estallará para la mayoría de las empresas. Solo un selecto grupo de compañías, especialmente aquellas con sólido respaldo financiero, podrá mantenerse y aportar valor real a largo plazo. Para Li, solo las organizaciones con recursos considerables podrán hacer que la IA resulte verdaderamente útil.
El uso de la IA en el día a día: ChatGPT y otros avances
Pese al escepticismo de figuras como Torvalds y Li, algunas herramientas de IA, como ChatGPT, han ganado popularidad, permitiendo a los usuarios interactuar de manera conversacional sobre distintos temas. Empresas líderes como Apple y Google continúan desarrollando y lanzando productos de IA, como Apple Intelligence y Gemini Live, disponibles en ciertos dispositivos y regiones específicas.
Las reflexiones de Torvalds sobre la IA presentan una visión prudente de una tecnología innovadora, pero envuelta en una notable carga de marketing. Su postura indica que el verdadero valor de la inteligencia artificial se apreciará cuando se desarrollen aplicaciones prácticas que demuestren un impacto constante y positivo en la vida de las personas y en la industria.
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